Mañana muchos ayuntamientos, ciudadanos, empresas y organizaciones participarán en la hora del planeta reduciendo su consumo de electricidad durante 60 minutos.
Quiero pensar que la mayoría de ellos también mantiene en su conciencia la idea de que reducir nuestro consumo es algo importante todo el año. Sin embargo me resulta difícil pensar que es así, algunos de ellos nos dan muestras de su hipocresía cada año.
Muchos ayuntamientos participarán en esta iniciativa pero son los mismos que no tienen reparo en encender la iluminación navideña en noviembre, algo que considero desproporcionado e innecesario, aunque algunos de ellos se empeñan en remarcar que las bombillas que utilizan son de bajo consumo, nunca está de más recordarles que la bombilla que menos consume es la que está apagada.
En cuanto a algunas empresas que participan que en esta iniciativa queriendo dar una imagen de compromiso y ayuda, deberían revisar sus procesos de producción, los cuales a veces no son muy “verdes”.
Yo, por mi parte, participaré en la hora del planeta, pero me gustaría que la idea principal de esta campaña se extendiera durante todo el año, de nada sirve reducir el consumo una hora si después derrochamos sin acordarnos de que cada gesto cuenta.