¿No os da la sensación de que los aparatos eléctricos duran cada vez menos? Se supone que la evolución de la tecnología debería hacer que también durasen más, ¿verdad? En muchos casos la clave se encuentra en la obsolescencia programada o predeterminada.
¿Qué es la obsolescencia programada?
Lo primero que hay que decir es que es un engaño que pagamos no solo los compradores, sino todos, ya que el coste ambiental lo pagamos entre la totalidad de ciudadanos. Los fabricantes, durante el proceso de diseño establecen una duración para cada uno de sus productos, así consiguen aumentar sus ganancias. Los grandes beneficiados son, sin duda, ellos. Los perjudicados son varios: por una parte los consumidores, que se ven obligados a comprar de nuevo, entrando en el juego de los productores; por otra parte, el entorno se ve afectado, ya que los RAEE (Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos) contienen, en la mayoría de los casos, materiales contaminantes muy perjudiciales para el medio ambiente y la salud.
La injusticia se agrava cuando los receptores de los residuos son países en vías de desarrollo, que pagan la codicia de los productores y la irresponsabilidad de los gobiernos que permiten este transporte.
La legislación española establece que la responsabilidad y los costes de la recogida y tratamiento de los objetos obsoletos corresponde a los fabricantes o a las entidades locales (por eso tiene la obligación de aceptar tus aparatos electricos o electrónicos estropeados a pesar de que no compres nada en el establecimiento), pero todos deberíamos exigir a los fabricantes más responsabilidad a la hora de diseñar sus productos.
¿Habéis notado este tipo de obsolescencia en alguno de vuestros aparatos? ¿Cuál crees que es la mejor forma de combatirla?
Os dejo el enlace de un documental que creo que os puede resultar interesante: Usar, comprar, tirar